Querida familia, amigos, hoy es
un día lleno de inquietudes y angustias, no por el anuncio del CNE, el cual nos
dejo un sabor amargo en la garganta, pero que al final no sabe a derrota, todo lo
contrario, sabe a triunfo, pero como relata el gran e ilustre William Shakespeare en Hamlet “Algo
huele a podrido en Dinamarca”, y del CNE emerge ese olor nauseabundo que se
desprende del fraude, pues es absolutamente conocida y ahora nuevamente
ratificada, la parcialidad política, no del CNE como institución, sino, de la
mayoría de sus rectores. Por lo que y a pesar de que no nos corresponde a
nosotros hacer justicia, si nos corresponde buscar incansablemente y a través de todos los medios legales hacer surgir la verdad y revivir la esperanza
de un futuro mejor.
Sabemos que no podemos esperar que el máximo tribunal del
país (TSJ) haga justicia, lo que si puede suceder es que se pronuncien a favor
del ilegitimo presidente, pero de algo si estoy completamente seguro, el tiempo
de Dios es perfecto, hagamos lo que tengamos que hacer, apegados a la leyes y a
los mandamientos de Dios, Venezuela es un pueblo noble, humilde y bueno, y se,
que Dios tiene preparado algo inmenso y grande para él. Pero para aquellos que
de alguna, traicionando todo principio ético y moral, fueron participes de este
vil engaño, tendrán más temprano que tarde un castigo ejemplar.
Hoy y muy a
pesar de todo este burdo teatro, estoy
mucho más convencido de que el pueblo Venezolano indistintamente de su
tendencia política, desea y quiere un cambio. Un cambio que los unifique y lo
fortalezca, un cambio que los saque de la ignorancia y la pobreza, un cambio
que le lleve luz a sus vidas, un cambio que los llene de paz y de amor puro y
verdadero.
Hace treinta años atrás, podíamos ver cerca de nuestras casas,
vecinos que atendiendo a las necesidades de su entorno y viendo la oportunidad
de desarrollo y crecimiento de su economía familiar, levantaban en casa una
bodega, allí se podía conseguir de todo y hasta tres marcas para elegir, hoy
por hoy, solo tienen refresco y caramelo. Es esto lo que verdaderamente queremos,
realmente no lo creo así, este domingo el pueblo dijo que quiere un cambio
y el cambio, sin duda alguna vendrá.
No estoy triste, pues no hay tiempo ni motivos
para estarlo, estoy lleno de orgullo, por la gran manifestación de este noble
pueblo en pro de un cambio, de ver a mi hijo, que aunque no pudo votar, estuvo
en los centros electorales, defendiendo los votos y participando en las
auditorias ciudadanas, de nuestro candidato Henrique Capriles que tuvo y tiene
el temple de enfrentarse al poder sin miedo, pero si, con el respaldo de
millones de venezolanos, que esperamos en un futuro no muy lejano, verlo
dirigir los destinos de este país hacia puerto seguro.
Entiendo que en muchas
personas estos resultados causen desmoralización y desesperanza, pero ante las adversidades
debemos ser aun mas fuertes, como lo dijo Henrique, esto debe darnos mas
fuerzas para luchar, no nos desactivemos, mantengamos nuestras ganas,
esperanzas y ánimos encendidos en nuestros corazones, solo así podremos lograr
el cambio que queremos, continuemos apoyando y acompañando a Henrique en esta
cruzada, es vital, pues somos la sangre, la adrenalina y la pasión que lo mueve,
que le da las fuerzas y la voluntad para seguir adelante. Henrique en 10 días
logro con esfuerzo lo que no pudo en meses, he allí al verdadero “LIDER”, no
sucumbamos, no lo abandonemos después de tanto sacrificio, solo hay un Cristo
de los pobre y es el hijo de Dios, pero si hay un LIDER, un LIDER con vocación,
humildad y pasión por su gente, un LIDER con las ganas y la voluntad de generar
bienestar para su pueblo, un LIDER lleno de esperanza y con muchas ganas de
trabajar por el progreso y la recuperación de esta noble patria.
Por último, todos
sabemos cuáles fueron los resultados reales, el gobierno y sus poderes no
podrán sostener esta mentira, y si por situaciones ya conocidas lo lograsen, tengan por seguro de
que no será por tiempo prolongado, pues los castillos de arena no son eternos.
A
mis hijos, ahijados y sobrinos, les digo, ustedes forman parte del futuro de
esta noble patria, sean humildes y honestos, amen a su prójimo aunque piense
distinto, sean transparente en su quehacer diario, manténganse firmes en sus
convicciones, no permitan que sus ideales sean manipulados y tergiversados,
piensen por ustedes mismo, que nadie lo haga por ustedes, piensen en el futuro
como una recompensa de Dios, pero trabajen, estudien y lábrense ese futuro
prospero y de progreso, pues ustedes son
los herederos de este suelo, no pierdan la Fe,
vivan de acuerdo al plan que Dios tiene para ustedes, yo estoy seguro,
de que tarde o temprano lograremos conseguir el cambio que este país necesita y
que todos estamos esperando.
Siempre en mis escritos he colocado frases, hoy quiero colocar una que en su esencia lleva un mensaje realmente poderoso:
“Te dire algo que ya sabes. En el mundo no todo es color de rosa, es un lugar mezquino y feo y por más fuerte que seas, la vida te pondrá de rodillas y no te dejará levantar si es que la dejas. Ni tu, ni yo, ni nadie golpea tan fuerte como la vida. Pero lo importante no son los golpes que das. Si no lo que eres capaz de soportar sin bajar los brazos. Cuanto eres capaz de resistir, sin tirar la toalla. Así es como se gana. Si sabes cuanto vales, exige lo que te mereces. Aguanta los golpes y no comiences a señalar ni a él, ni a ella ni a nadie porque no estas donde quieres estar. Los cobardes hacen eso y tu no eres un cobarde, tu eres mejor que eso.”
Dios los bendiga.