miércoles, 19 de septiembre de 2018

La Verdad sea dicha

El Domingo 16 de Septiembre asistí a la primera misa del día, Monseñor quien ya  nos tiene acostumbrados a sus excelentes, sinceras, transparentes y acertadas homilías, hizo énfasis en  varios aspectos de nuestro acontecer diario, como creyentes, familias e individuos, entre ellos y aunque todos fueron importantes y de alta sensibilidad humana, destaco los tres que considero más resaltantes:

1.- La Fe y Las Obras,
2.- La despreocupación y pasividad de los padres en cuanto a la educación y preparación de los hijos.
3.- La omisión, desinterés, pasividad y la falta de reacción del venezolano ante la crisis que atraviesa la nación.

Primer aspecto: “LA FE Y LAS OBRAS”, muchas, pero muchas personas, piensan que con tan solo ir a misa todos los domingos, hacer oraciones diarias, tener imágenes de la virgen y santos por doquier, publicar oraciones en redes sociales, rasparse las rodillas y que el pecho les quede morado de tantos golpes, es suficiente para lograr la santidad, y lastimosamente están errados, pues la palabra nos dice claramente,

"Así también la fe, si no tiene obras, está realmente muerta."
Santiago 2:17

"Y al contrario, alguno podrá decir: ¿Tú tienes fe?; pues yo tengo obras. Pruébame tu fe sin obras y yo te probaré por las obras mi fe." 
Santiago 2:18  

Imposible una mejor explicación, la Fe sin obras no nos sirve de nada, por supuesto, debemos orar como complemento, asistir a misa y no por obligación, pero es necesario que hagamos mayores esfuerzos por incrementar nuestras obras, pues esas serán las cuentas más relevantes,  esa será la llave que  nos abrirá las puertas el día de nuestro juicio final.

“Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; era forastero, y me acogisteis; Mateo 25:35
Estaba desnudo, y me vestisteis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a verme." Mateo 25:36

Segundo aspecto: Los Hijos y su Educación, tal y como lo expreso Monseñor, los padres tenemos la responsabilidad moral de participar activamente en la educación de nuestros hijos, pero muchos padres han aceptado que estos abandonen los estudios, no solo a nivel universitario, este fenómeno se da en todos los niveles educativos, existen casos donde inclusive abandonan estando en los últimos semestres para culminar su carrera, tomando como pretexto la situación país, los bajos salarios, etc, pero y también coincido en esto con él, muy a pesar del deber y responsabilidad moral, Dios nos dio el libre albedrió, por lo que cada quien tiene la libertad de decidir y accionar como mejor le parezca, no obstante, tal y como sucede con todas nuestras acciones, las decisiones que tomamos y los pecados que cometemos Dios los perdona, pero las consecuencias que estos generan NO, estas quedan y toca asumirlas con las misma voluntad y fuerza con las que fueron concebidas, sin responsabilizar a nadie por ellas, pues son individuales y como la antigua cedula de la cuarta república, intransferibles.

Hasta el día de hoy, mis hijos, a pesar de las circunstancias económicas que agobian al país y que son ya conocidas y vividas por todos, se han mantenido firmes en su convicción de continuar y culminar sus respectivas carreras, porque, muy a pesar de estar haciendo planes para emigrar, piensan que si deciden regresar, estarán ya preparados y colegiados profesionalmente.

“Los abrazo, felicito y me llena de orgullo esa inteligente y sabia decisión”.

Tercer aspecto: Monseñor esta en lo correcto al afirmar que todo lo que está sucediendo es consecuencia de planes y estrategias bien concebidos, a lo que añado, datan desde el Caracazo, si familia, amigos, desde el Caracazo en 1989, pues lo que ocasiono en ese entonces esa llamada “espontanea explosión social” fin simplemente el anuncio del aumento de la gasolina, esto, no es nada, en comparación con  todo lo que hasta hoy ha sufrido y está sufriendo el venezolano y aun no pasa nada, esto, confirma la teoría de que esa supuesta explosión fue inducida y que allí comenzó la gestación de este monstruo, este cáncer destructivo, al que llaman socialismo del siglo XXI.

Hoy tenemos escasez, desabastecimiento, aumentos de precios incontrolables en alimentos, medicinas y transporte, falta de efectivo, una inflación volátil e indetenible, bancos colapsados, dos aumentos de la gasolina, una alta tasa de desempleo, un gran parque industrial totalmente diezmado, acabado, nuestros ancianos muriendo en largas colas por una mísera pensión, gente comiendo de la basura y sigue sin ocurrir ninguna “espontanea explosión social”.
Hasta que el pueblo, mi querida familia y amigos, no deje de pensar como pueblo, no habrá ningún cambio, ninguna explosión social, hace falta que pasen por una metamorfosis radical, por una transición que lo transforme de pueblo a ciudadano.

Esto lo tiene claro el régimen y sabe muy bien que no les conviene que se de esta transición, este cambio, pues esto, representa un grave peligro para que la seudo-revolución socialista se mantenga en el poder, por lo que, sin escrúpulo alguno ha sometido al que ellos llaman pueblo soberano, a una degradación continua en detrimento de su calidad de vida, desarrollo y por ende, de su crecimiento personal como individuos, como ciudadanos y de esta manera poder manipularlos a su antojo. Lo que me recuerda el articulo de un especialista (Psicólogo) que extrajo mi hermano Richard Ponce de Twitter y público en su muro de Facebook, nada alejado de la realidad.

"Porque se ha embotado el corazón de este pueblo, han hecho duros sus oídos, y sus ojos han cerrado; no sea que vean con sus ojos, con sus oídos oigan, con su corazón entiendan y se conviertan, y yo los sane."
Mateo, 13:15


Dios los bendiga…se les quiere…