viernes, 16 de octubre de 2020

VIVIR O CONVIVIR

 

Existen personas, que no se permiten ser realmente felices, pues en su día a día solo viven pendiente de los demás, no para criticar, al contrario, viven pendientes de ser criticados, haciendo de esto una rutina diaria en su vida.

Esto genera daños en las relaciones personales y familiares, las enturbia y las llena de dudas, en algunos casos sin intención pero en otros es todo lo contrario.

Lamentablemente estas personas nunca aprendieron a convivir, ojo no es vivir, es CONVIVIR, algo totalmente distinto, tu puedes vivir tu vida como tu quieras, como dice la canción de Yordano, “total es tu vida”, pero resulta que en la mayoría de los casos hay acciones, que, producto de esas decisiones personales, generan caos a tu alrededor y en el ambiente donde te desenvuelves, donde haces vida, ósea, donde CONVIVES.

Dios nos dio el privilegio del libre Albedrio, con esto nos otorgó la potestad de obrar según nuestro criterio y convicción. El problema está en que en ocasiones las personas que viven sin convivir, no les importa si esas decisiones afectan, dañan, perjudican o si van en detrimento y perjuicio de su entorno y allí es donde radica realmente el problema.

Tienes una vida y solo la vives según tu criterio personal, no importa quien está a tu alrededor, todo molesta, nunca nada es para mejorar, solo piensan que se entrometen en tu vida, eso es triste, porque las personas que realmente quieren estar contigo, que sienten amor por ti, que quieren apoyarte, simplemente se alejan, para que esos sentimientos no se vean afectados por las decisiones que por vivir y no convivir toman sin mediar, en ocasiones hasta sin pensar, no obstante y aunque pueden recapacitar, no lo hacen, porque esa forma de vivir no se los permite, por lo que, nunca podrán disfrutar de una amistad sincera, una relación de pareja permanente o una relación familiar estable, porque, simplemente es su vida..

Siendo inteligentes, podemos vivir y convivir, haciendo valer criterios, opiniones personales, solo si estas no van en detrimento o perjudican al entorno, se puede mantener una relación de pareja estable, una amistad realmente sincera y lo más importante aún, una relación familiar estable y permanente.

En mi opinión personal, siendo la Familia el núcleo de la sociedad y la iglesia Domestica por excelencia, debemos de alguna manera velar por el bienestar de los miembros que la componen, estén o no a nuestro lado, sin limitarlos y respetando las decisiones que de allí broten, ese es nuestra función, nuestro papel real, ser guías, sin ambigüedades ni mezquindades. Esa es mi visión, mi misión y basándome en ella vivo y convivo. Ese es el secreto de la verdadera felicidad….

En fin, aunque somos libres de decidir, estas decisiones nos hacen esclavos de las consecuencias que estas generen, por lo que se debe tener la madures para acatar y  aceptar vivir con ellas.

“ERES LIBRE DE TOMAR LAS OPCIONES QUE QUIERAS, PERO ERES PRISIONERO DE SUS CONSECUENCIAS”

PABLO NERUDA

Dios los bendiga

 

 

 

 

lunes, 6 de abril de 2020

REFLEXION I

Queridos Lectores, Familiares y Amigos..

Siendo honesto, soy una persona con muy poco sentido de sociabilidad, no me considero mala persona, me gusta ayudar en la medida de mis posibilidades, mis oraciones están destinadas al prójimo y mi Familia, pero, aunque soy muy buen escucha, no soy buen conversador, sin embargo con el pasar del tiempo, bien sea por estudios o por trabajo, me ha tocado dirigir a una gran cantidad variopinta de personas, por lo que, me a tocado esforzarme en sobremanera para poder manejar y superar en forma positiva ciertas situaciones.

Puesto que pertenezco a ese pequeño y selecto grupo de personas, que ama incondicionalmente a su Familia (Padres, Esposa, Hijos, Hermanos: de sangre, de crianza y cuñados a quienes considero mis hermanos, Suegra, tías, Sobrinos.),  para el cual, siempre y sin importar las circunstancias la familia esta primero, formación que, dependiendo del color del cristal con que se mire es, una virtud para unos y un defecto para otros.

Siempre y en la medida de mis posibilidades he ayudado y tratado de ayudar a gran cantidad de personas y al momento de hacerlo, nunca espero ni pido nada a cambio, al respecto,  muy pocas se sienten agradecidas, otras no, no soy quien para juzgar, eso es cuestión de cada personalidad y queda en la consciencia de cada quien, además,  las Bendiciones recibidas en ambos casos, son las mismas. “Pero tú, cuando des limosna, que no sepa tu mano izquierda lo que hace tu mano derecha” Mateo 6:3

Podemos orar por estas personas y por aquellas que, de alguna manera están atravesando situaciones difíciles, inclusive por nosotros mismos, pero es eso realmente suficiente? En el primer caso, para que la oración pueda convertirse en ayuda verdadera, debe hacerse con amor, debe salir del corazón y lo más importante, debe ir acompañada de obras grandes o pequeñas que podamos lograr con humildad, disposición  y buena voluntad. El segundo caso, es un poco más complicado, puesto que cuando se ora bajo la premisa de la individualidad se cae en un acto egoísta, ya que se omite al colectivo y se enfoca la oración en un individuo, por esta razón es que en ocasiones se generan sentimientos de abandono y la creencia de que Dios no nos escucha. “Escucha lo que te mando: Esfuérzate y sé valiente. No temas ni desmayes, que Yo soy el Señor tu Dios, y estaré contigo dondequiera que vayas” Josué 1:9

De verdad, no importa cuántas Vírgenes y Santos se tengan en casa, vehículos, etc, ni cuantas imágenes y oraciones se suban a las redes sociales, por cierto, Dios y no tiene Facebook, Instagram ni Twitter, eso solo se queda allí (“Mas tú, cuando ores, entra a tu aposento y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensara en público” Mateo 6:6)

En nuestras vidas, después de “Dios” esta la familia, independientemente de ideologías político partidistas, creencias o religión, no obstante, por distintas causas u otros motivos que de alguna manera crean que existen, algunos, anteponen a terceros por encima de sus familias, en ocasiones enemistándose con ellos y con los que en algún momento fueran sus mejores amigos. Esto no causa rabia, ira o dolor, solo decepción, pues distorsiona la calidad de  las acciones que se intentan ejecutar y tal vez sin mala intención caen o cometen errores en sus actos u comentarios, sin tomarse un momento para pensar si con eso, pueden, directa o indirectamente perjudicar a otros, incluyendo familiares.

Hoy día, doy Gracias a Dios, por los logros de aquellos que en algún momento tuve el privilegio de compartir y como instrumento de Dios servirles de guía, y con quienes aún mantengo comunicación, y mis oraciones están destinadas a ellos y por aquellos por los que, a pesar de los consejos, desviaron su camino.   

La vida, nos ha golpeado duro, hemos pasado por distintas situaciones difíciles, en las que, la familia siempre estuvo presente y como instrumentos de Dios, fueron contadas las personas ajenas a la familia que demostraron su afecto y disposición, hoy ellos, tienen mis respetos y les retribuyo mi apoyo incondicional, hoy, mañana y siempre.

Historia de la Tortuga y el Alacrán

Ambos necesitaban cruzar el rio, pero el alacrán sabía que si se lanzaba al agua se ahogaría, entonces le dice a la tortuga: “crúzame en tu caparazón”, ella le responde bondadosamente: “sí, pero por favor no me piques”, el alacrán se subió sobre la tortuga y justo cuando iban a llegar el alacrán la picó, ella le pregunta: “¿Por qué lo hiciste? ahora ambos nos vamos ahogar y vamos a morir”, El le respondió: “es mi naturaleza picar”.

Así como esta historia, es la vida, el instinto del Alacrán es atacar, sin importar las consecuencias, así funcionan algunas personas, estas aunque las ayudes, aun sin querer, buscaran de alguna manera, como el Alacrán, causarte daño,  está en su ser, es su naturaleza, fueron creciendo y mal formando su carácter y accionar, sin saber que precisamente por eso, no logran encontrar la verdadera felicidad.


Dios los bendiga...